lunes, 2 de diciembre de 2013

este soy yo... su hijo, el menospreciado, el...sin valor(¿?), el perdido, sumergido en el pecado, del cual jamas pensé poder salir, alguna vez, de tanta pena q tenia mi vida, pensé q solo morir podía solucionar mis cosas, hasta q llego El... no lo vi en una cruz colgado como me lo enseñaron alguna vez, tampoco en un retrato, simplemente cerré mis ojos y estaba allí, tocando mi corazón con Su presencia, haciendo q de mi alma brotaran lagrimas, sintiendo como salian de mi, el dolor, el resentimiento, el fracaso y la pena x haber nacido, senti qm lleno tanto... me inundo...de consuelo, afecto, sanando cn su amor, q eso malo q lleve x años en mi, comenzo a salir, y es maravilloso q aun hoy lo sigue haciendo, hace tiempo q sigo a Jesus, y veo q sigo siendo el mismo torpe, q tropieza muchas veces cn las mismas cosas de antes, me pongo nervioso, ansioso,m enredo otra vez y otra vez, en mis debilidades, pero, Su gracia esta ahi, no me preguntes como, ni xq?!!, solo se q esta, una, otra y otra, y otra vez, no le mando a Faraón 10 plagas q los enloqueció delante de mis ojos, no abrio el mar Rojo para mi, no detuvo el sol, (o la tierra en su caso), eso no lo vi, senti Su presencia en mi vida, Su compañia en momentos malos y de dolor, Sus brazos en mi, en la tempestad, su alivio en mi dolor, y vi como mis mares de angustias se abrian, vi como el sol se detuvo, para q la noche q temía no llegara, y vi a un Jesús, venciendo triunfante sobre mis enemigos en su muerte, siendo la cruz vacia, el simbolo mas grande para mi, de victoria, de amor, de entrega, rendicion, solo x salvarme, x salvarnos...este es mi Dios, nuestro Dios, digno de honor de adoración, digno de amor...gracias x ser tu hijo y gracias xq ...ESTE ES NUESTRO DIOS!!!!
Isaias 25:9

jueves, 21 de octubre de 2010

LA ULTIMA LAGRIMA

Allí estaba, sentado en una banqueta, con los pies descalzos sobre las baldosas rotas de la vereda; gorra marrón, manos arrugadas sosteniendo un viejo bastón de madera; pantalones que arremangados dejaban libres sus pantorrillas y una camisa blanca, gastada, con un chaleco de lana tejido a mano.

El anciano miraba a la nada. Y el viejo lloró, y en su única lágrima expresó tanto que me fue muy difícil acercarme, a preguntarle, o siquiera consolarlo.

Por el frente de su casa pasé mirándolo, al voltear su mirada la fijó en mi, le sonreí, lo saludé con un gesto aunque no crucé la calle, no me animé, no lo conocía y si bien entendí que en la mirada de aquella lágrima se mostraba una gran necesidad seguí mi camino, sin convencerme de estar haciendo lo correcto.
En mi camino guardé la imagen, la de su mirada encontrándose con la mía. Traté de olvidarme. Caminé rápido como escapándome. Ni bien llegué a mi casa me senté en la compu esperando que el tiempo borrara esa presencia…. pero esa lágrima no se borraba…
Los viejos no lloran así por nada, me dije.
Esa noche me costó dormir, la conciencia no entiende de horarios y decidí que a la mañana volvería a su casa y conversaría con él, tal como entendí que me lo había pedido. Luego de vencer mi pena, logré dormir.
Recuerdo haber tomado unos mates, compré facturas y muy deprisa fui a su casa convencido de tener mucho por conversar.
Llamé a la puerta, cedieron las rechinantes bisagras y salió otro hombre.
- ¿Qué desea? – Preguntó, mirándome con un gesto adusto.
- Busco al anciano que vive en esta casa. – Contesté.
- Mi padre murió ayer por la tarde – Dijo entre lágrimas.
- ¡Murió!- Dije decepcionado. Las piernas se me aflojaron, la mente se me nubló y los ojos se me humedecieron.
- ¿Vos quien sos? – Volvió a preguntar.
- En realidad nadie – Contesté, y agregué – Ayer pasé por la puerta de su casa, y estaba su padre sentado, vi que lloraba y a pesar de que lo saludé no me detuve a preguntarle que le sucedía pero hoy volví para hablar con él pero veo que es tarde.
- No me lo va a creer pero Usted es la persona de quien hablaba en su diario.
Extrañado por lo que me decía, lo miré pidiéndole más explicación.
- Por favor, Pase – Me dijo aún sin contestarme.
Preparo un mate y me llevó hasta donde estaba su diario y la ultima hoja rezaba: “hoy me regalaron una sonrisa plena y un saludo amable… hoy es un día bello”.
Tuve que sentarme, me dolió el alma de solo pensar lo importante que hubiera sido para ese hombre que yo cruzara aquella calle.
Me levanté lentamente y al mirar al hombre le dije: – Si hubiera cruzado de vereda y hubiera conversado unos instantes con su padre…- Pero me interrumpió y con los ojos humedecidos de llanto dijo: – Si yo hubiera venido a visitarlo al menos una vez este último año, quizás su saludo y su sonrisa no hubieran significado tanto.

sábado, 9 de octubre de 2010

CONFESANDO NUESTROS PECADOS


El Salmo 32 es una referencia de la experiencia que tuvo David luego de haber pecado con Betsabé y luego de que él confesara su pecado al Señor. David siente la mano fuerte de la disciplina del Señor en su vida. "Porque de día y de noche se agravó sobre mí tu mano; se volvió mi verdor en sequedades de verano" (v.4).
En otras palabras, David dice: Dios, tu mano era tan fuerte sobre mí que era como si exprimieras una esponja. "Señor, me has exprimido todas mis fuerzas". No es fácil soportar la mano de disciplina del Señor sobre nosotros, pero eso demuestra cómo y cuánto nos ama. "Porque el Señor al que ama castiga, y azota a todo el que recibe por hijo" (Hebreos 12:6).

La disciplina del Señor nos lleva a sus brazos de perdón. "Bienaventurado aquel cuya transgresión ha sido perdonada, y cubierto su pecado. Bienaventurado el hombre a quien Jehová no inculpa de iniquidad y en cuyo espíritu no hay engaño" (vs1,2). Mientras David estuvo en silencio y no confesaba su pecado, sintió la disciplina del Señor sobre él, pero cuando confesó su pecado, esa carga se fué. Luego Dios, en su Gracia, borró del libro todo lo que se le imputaba. Esto significa "pornerse a cuentas con Dios."
 1ra de Juan 1:9 nos dice que si confesamos nuestros pecados, Él es fiel y justo para perdonarnos nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad."

Reconocer. confesar nuestro pecado (a Dios o algún ministro, pastor, líder, si esta la necesidad)  nos guía a obtener el favor y la gracia protectora de Dios. "Tú eres mi refugio; me guardarás de la angustia; con cánticos de liberación me rodearás (v.7). David se volvió de ocultar su pecado a confesión y luego a cánticos. Cuando somos limpios, Dios pone cánticos en nuestro corazón.

La misma mano que disciplina es la que también perdona y guarda. ¿Estás guardando pecado en tu corazón? Le conté a Dios de mi pecado, lo que pesaba y pasaba en mi corazón , sabia que El lo sabia, pero aun así esperó que se lo contara, para demostrarme que esta atento a mis actos, y que nada se le escapa, por eso permitió la sequía en mi, para darme en el momento justo la lluvia de Su gracia y amor... contale... ahora mismo y recibirás de Dios su perdón y favor.

jueves, 7 de octubre de 2010

Sos feliz?



Vi esta imagen hace un ratito en un facebook. Estaba en inglés. Me tomé el trabajo de traducirla porque me pareció muy clara y  tannn importante!
Deberíamos hacernos esta pregunta! No se si todos los días, pero al menos semanalmente.
Sos feliz?
Vivís plenamente la vida que Dios te dió? O estás viviendo la vida que otros quieren que vivas?
Lo que hacés, lo hacés por convicción o porque se espera eso de vos?
Estás dispuesto a cambiar?
Einsten dijo: “Si buscás resultados diferentes, no hagas siempre lo mismo”
Vale la pena detener el “piloto automático” en el que muchas veces nos encontramos, y comenzar a pensar en nuestra vida, en nuestras decisiones, en nuestro presente y en lo que deseamos construir para nuestro futuro.

Hey, soy Jose. Como que ya no me conocen?



Una de las historias que más me conmueve es la de José. La encontrás en la Biblia (Génesis cap 37 al 50).
La vida lo llevó a otros rumbos, diferentes. El tiempo, el cambio de look, las tradiciones cambiadas, hicieron que al final de la historia, al reencontrarse, ni sus hermanos lo reconocieran.
Sin embargo José si los reconoció perfectamente. El corazón de José era el mismo, sus convicciones no cambiaron, su espíritu estaba intacto. De esto y algo más, habla el Track 05 de Arriba!, el último cd de Rescate, banda que admiro profundamente.
Para quienes hayan pasado por algo similar, salir de un contexto conocido, familiar, seguro y cómodo; para afrontar nuevos sueños, nuevos desafíos, nuevos destinos, mi abrazo a la distancia.